"Solo existo en la medida en que existo para otros, y en última instancia ser es amar" (Enmanuel Mounier)

viernes, 11 de enero de 2008

36. Críticas al libro de Pagola

Dado que os he puesto aquí varias reseñas sobre el libro de José Antonio Pagola, parece razonable hacerse eco de la condena que ha recibido en estas semanas por parte del Obispo de Tarazona, a través de una carta pastoral y de varios escritos de especialistas en Cristología, todo ello publicado en la web de la diócesis.
Bego nos mandó por correo electrónico tanto la carta como la moderadísima contestación de Pagola, que se ha publicado en muchos medios digitales.
El gran titular es "El libro de Pagola hará daño".
En mi opinión, desde luego, hará daño, pero a las visiones anquilosadas, deformes y acomodadas de Jesús de Nazaret y de su mensaje.
He leído con interés estos días los cuatro artículos de los profesores de cristología y teología que apoyan la carta del Obispo de Tarazona (que por cierto, trata de idiotas a los "pobres lectores sin elementos de juicio", incluidas las pobres monjitas que se lo regalan con ilusión a la superiora: desde luego el tono de la carta "pastoral", dirigida a un público supuestamente "borreguil", es deplorable). La verdad es que no pretendo entender todas esas eruditas reflexiones, pero discrepo absolutamente de las que sí alcanzo a comprender, aunque claro, será porque carezco de "elementos de juicio".
En mi opinión, todos ellos acaban dejando claro que no han entendido nada: se trata de un libro sobre el Jesús histórico (algo que en sí solo ya parece que resulte molesto) y se basa (porque sólo puede basarse) en lo mismo que todo el trabajo de gente de reconocido prestigio como Schweitzer, Schillebeeckx, Meier, Crossan, Theissen o Brown: en el conjunto de documentos disponibles, en los avances arqueológicos y antropológicos, y en el lote de técnicas y métodos desarrollados con tanto esfuerzo en el último siglo, a lo largo de sucesivas búsquedas.
Sin embargo, sorprende ver que lo que todos estos "expertos" critican es básicamente que Pagola no le de a la Tradición de la Iglesia validez histórica, lo cual sería absurdo ya que no puede tenerla en este terreno, y nunca se la han dado ninguno de los investigadores católicos de prestigio. Es de notar, sin embargo, que la mayoría de estos investigadores van con mucha más cautela que Pagola, exponiendo sus conclusiones como hipótesis teóricas, algo parecido a como Copérnico o Galileo expusieron en su día las suyas. Pagola sólo ha girado ligeramente el brillante foco que supone la investigación histórica sobre la vida de Jesús, y lo ha orientado para que empiece a iluminar (por fin) el Jesús de la fe.
Pero, claro, ese es precisamente el peligro. Porque, ¿quién de esos pobres "borregos" va a leer un libro de Brown o de Meier, de seiscientas páginas y llenos de citas al pie? Eso no es realmente peligroso. Lo que les preocupa a algunos es que, en un libro dirigido al gran público y que está teniendo un éxito considerable, y a la luz de ese extraordinario foco, se cuestionen algunos de los mitos que la Iglesia Católica ha dejado perduren en la imaginería religiosa popular (en ocasiones por motivos que pueden resultar comprensibles), incluso aunque la propia "intelectualidad oficial" católica del siglo XXI tenga asumido que como mínimo son cuestionables. Empezando por el mismo hecho de iniciar la historia de Jesús en Nazaret de Galilea, en lugar de en Belén. Es lo que llaman "la fe de los sencillos".
Quizás sea verdad entonces, en parte, que el "Jesús de Pagola" no es del todo "el que enseña la Iglesia". Pero a lo mejor lo que habría que hacer más bien es revisar un poco éste último... No a la la luz del libro de Pagola, sino a la del trabajo y los descubrimientos de tantos y tan comprometidos investigadores, a lo largo de las últimas décadas.
En fin, todo esto serán seguramente tonterías porque uno (iluso que se sabía indigno pero se creía miembro del Pueblo de Dios) carece en el fondo de elementos de juicio, y no como el sr. Obispo de Tarazona que desde que, como indica literalmente su página web, "sintió la llamada de Dios al sacerdocio a los 7 años, y vivió como monaguilo en su parroquia", no ha debido dejar de acumular elementos de juicio y discernimiento de los que sí que valen. Así cualquiera pastorea.
Por cierto, casi todo lo que el libro de Pagola dice se enseña sin problemas, por ejemplo, en la asignatura "El Jesús Histórico", impartida en la Universidad Pontificia de Salamanca. En esta excelente web están todos los temas y apuntes de la asignatura, que yo he consultado alguna vez. En la bibliografía aparecen todos los autores e investigadores que he citado antes, muchos de ellos denostados por el sr. Obispo en su carta. También está el excelente currículum de los profesores, por si acaso.
Un abrazo a todos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Buenas tardes bloguero:
He estado hojeando tu creación y creo que tus ideas harán daño sobre todo a los incautos que no puedan leerlas críticamente.
Creo que debes ser más conservador si quieres seguir siendo un miembro activo de esta nuestra Iglesia.

Fdo: Demetrio Fernández Obispo de Tarazona.

PD: Soy Cris y me parece una currada el blog y su banda sonora.
Un beso